Los percebes gallegos son un verdadero tesoro de las costas gallegas que ha conquistado el paladar de los amantes de los frutos del mar en todo el mundo. Este codiciado manjar es conocido por su aspecto peculiar y su sabor incomparable. Descubre en este artículo el fascinante mundo de los percebes gallegos, sus características únicas, cómo se recolectan y la mejor manera de saborear esta delicia del mar.

¿Cómo es el percebe?

El percebe se distingue por su pedúnculo carnoso protegido por una piel negra y robusta. Su tamaño suele ser de aproximadamente 5 cm de longitud por 2,5 cm de diámetro. En la parte superior, presenta una especie de uña formada por varias placas que protegen su interior de posibles depredadores.

Percebes gallegos: La Excelencia del sabor

Los expertos en percebes dividen esta delicia marina en dos categorías: los «de sol» y los «de sombra». Los percebes gallegos pertenecen a la primera categoría, ya que crecen en zonas soleadas y batidas por el mar. Estas condiciones les otorgan un pedúnculo corto y grueso, así como un sabor intenso y único que los hace muy apreciados por los conocedores.

En contraste, los percebes «de sombra» suelen tener un cuerpo más largo y delgado. Estos percebes crecen en zonas menos expuestas al sol y con menor oleaje, lo que resulta en un mayor contenido de agua en su carne. Generalmente, provienen de las costas marroquíes y son menos valorados en términos de sabor y textura.

La recolección de percebes

La recolección de percebes es una tarea manual y peligrosa que se lleva a cabo en las rocas del litoral gallego. Son los «percebeiros«, recolectores de percebes, quienes se adentran en las aguas tumultuosas para recolectar este manjar. Esta profesión es una tradición ancestral que se transmite de generación en generación y que requiere valentía y destreza.

Los «percebeiros» se enfrentan a las inclemencias del tiempo y al riesgo constante en busca de los mejores ejemplares. Esto, junto con la dificultad de acceso, contribuye a que los percebes gallegos sean altamente valorados.

¿Cómo prepararlos?

La mejor manera de disfrutar plenamente del intenso sabor del percebe es cocido y sin demasiados aderezos. Tradicionalmente, se cuecen en agua marina durante unos minutos. Aquí te contamos paso a paso como cocer percebes Cocer percebes fácilmente paso a paso | Mariscos O Grove

Los amantes de los percebes gallegos suelen decir: «Auga ferver percebes botar, auga ferver percebes quitar». Esta técnica simple resalta el sabor natural de la carne del percebe y lo convierte en un manjar verdaderamente exquisito.

Para disfrutar de esta delicia marina, se separa la parte comestible del pedúnculo a la altura de la uña y se retira la piel protectora. El resultado es un bocado de mar tierno y sabroso que deleita los sentidos y se convierte en un verdadero lujo culinario con una historia fascinante y un sabor inigualable.

La valentía de los «percebeiros» y las condiciones únicas del entorno gallego contribuyen a hacer de estos percebes una auténtica joya. Si aún no has tenido la oportunidad de probarlos, te invitamos a hacerlo y descubrir por qué los percebes gallegos son tan especiales.